A diferencia de las ventanas convencionales, las ventanas de techo están más expuestas a condiciones meteorológicas extremas, como el granizo o el viento, por lo que deben ser aún más resistentes. Por eso el perfil de madera Solid Pine está reforzado en el exterior con un recubrimiento de aluminio, sinónimo de robustez y durabilidad.
La combinación de madera y aluminio ofrece numerosas ventajas.
Por un lado, la madera, materia prima renovable, garantiza un mínimo impacto medioambiental.
Este material noble también aporta un ambiente cálido y confortable en el interior. Por otro lado, el aluminio refuerza la estabilidad y la vida útil de la ventana de techo.
Esta sinergia entre madera y aluminio no solo proporciona un aislamiento térmico y acústico óptimo, sino también una protección eficaz contra las inclemencias del tiempo. Así disfrutas de un espacio habitable cómodo y duradero, con la tranquilidad de contar con una ventana de techo preparada para resistir el paso del tiempo. Al elegir este tipo de perfil, apuestas por un producto que combina estética, rendimiento y respeto por el medio ambiente.