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Ventanas y cristales. Estas dos palabras son casi inseparables hoy en día y, sin embargo, durante la mayor parte de la historia, las ventanas eran simples agujeros en una pared o tejado que se cubrían de pieles de animales, cuerno o papel. Poco que ver con las ventanas de aluminio de hoy en día: aislamiento térmico del exterior, cámara de aire interior, control solar, baja transmitancia térmica, dimensiones a medida.
Actualmente, hay una gran variedad de tipos de vidrio y láminas de vidrio que pueden incorporarse a ventanas y puertas (sean de aluminio o no) con sus propias características y mecanismos.
Ya sean cristales de baja emisividad, triple acristalamiento, claraboyas o ventanas con bisagras oscilobatientes, se han desarrollado opciones especiales de ventanas y cristales para todas las necesidades posibles.
Las ventanas modernas llevan varias capas de vidrio en lugar de una sola hoja de cristal. Esto no solo les da una mayor eficiencia energética, sino que mejora otros aspectos como el aislamiento acústico y actúa como vidrio de seguridad.
Los tipo de ventana con esta tecnología de acristalamiento moderna ofrecen soluciones para los siguientes aspectos:
Aislamiento térmico
Seguridad y protección
Insonorización
Privacidad
Protección solar
Espejos
La base de la mayor parte de la tecnología del vidrio es el simple vidrio flotado, llamado así por su proceso de fabricación. El vidrio o cristal flotado se desarrolló en el Reino Unido en la década de 1950 y consiste en verter vidrio fundido sobre estaño líquido, con lo que este sube a la superficie formando una capa plana y transparente de vidrio.
A continuación, se enfría y se corta para darle forma. Después, se pueden aplicar diversos revestimientos, tratamientos y combinaciones especiales con otros vidrios para crear el tipo de producto final deseado.
Nuestros cristales para ventanas cubren todos los tipos de cristales que necesitas, con aislamiento térmico del exterior y control solar. Son varios los tipos de vidrio que ofrecemos: vidrio con cámara, vidrio acústico o vidrio sencillo con una gran eficiencia energética.
No tenemos límite en calidad ni en funciones para ventanas como la abatible. Un ventanal de láminas de vidrio (disponible en varios colores) puede ofrecer un cerramiento herméticamente aislado (en toda la habitación prácticamente hasta el techo), al igual que los cajones de persiana, dejando el interior de la fachada a salvo de la radiación solar.
Materiales como el plástico o el aluminio son aptos para el recubrimiento del vidrio y la perfilería en balcones y terrazas. Aquí recomendamos un sistema de aluminio con un tipo de vidrio o cristal para ventana que sea aislante, preferiblemente con cámara de aire para un buen aislamiento térmico.
El aluminio de la ventana debe ser de calidad, al igual que el cristal y el tipo de vidrio escogido. No vale con cualquier cristal ni con cualquier tipo de vidrio si quieres que los tipos de cristales para ventanas que instales protejan eficazmente el interior.
La cámara de aire o gas noble cumple su función desde el primer día, dando al cristal un poder aislante que, en combinación con el aluminio, garantizan un interior bien aislado por el acristalamiento.
En las ventanas destinadas a proporcionar un aislamiento excelente, se utiliza un mínimo de dos hojas separadas por un espaciador, mientras que el hueco se rellena con aire seco o un gas como el argón o el criptón.
Es lo que se conoce como unidad de vidrio aislante (UVA). Los revestimientos de vidrio especiales también pueden ayudar a regular el coeficiente de captación solar (SHGC), o cuánto calor se gana en el interior con la energía solar.
Los revestimientos de baja emisividad también pueden ayudar a eliminar los rayos ultravioleta que dañan la moqueta, los muebles y las cortinas con el tiempo, así como a reducir la captación de calor en los climas cálidos y la pérdida de calor en los fríos.
En este sentido, la cámara de aire es tu mejor aliada, junto con un aluminio de calidad, del cual puedes escoger el color. Si prefieres el acabado de madera, puede funcionar de maravilla junto con un vidrio laminado.
Ya ves que la ventana es mucho más que una hoja de cristal; de nada sirve el cristal si no tiene todos los elementos que lo acompañan. Tampoco es lo mismo una capa de cristal que varias capas de cristal.
Habla con nosotros sobre tu proyecto y será un placer asesorarte. Los cristales o vidrios de tu ventana suponen un tema clave para una casa de obra nueva o reformada. Elige un cristal adecuado para tus ventanas, ya que cada ventana tiene su cristal y viceversa.
Ya sea para aumentar la seguridad contra posibles robos o para reducir el riesgo en zonas como los cuartos de baño, los cristales especializados con fines de seguridad y protección pueden integrarse en casi cualquier tipo de ventana o puerta. Hay dos tipos, cada uno con características diferentes que se adaptan mejor a distintas aplicaciones:
El laminado de seguridad consiste en una combinación de al menos dos vidrios con una lámina metálica especial intercalada. Esto significa que, si se rompe, el cristal permanece unido a la lámina metálica y no se hace añicos cortantes.
El vidrio laminado de seguridad se utiliza, por ejemplo, en la fabricación de parabrisas de automóviles para eliminar el riesgo de lesiones causadas por fragmentos de vidrio que salgan despedidos durante un accidente.
Sin embargo, se ha vuelto cada vez más frecuente en la construcción de viviendas, ya que la lámina metálica entre los cristales aumenta la protección antirrobos.
El vidrio de seguridad de una sola hoja consiste en vidrio flotado estándar que se calienta rápidamente a altas temperaturas y luego se enfría rápidamente.
Esto crea una tensión interna en la hoja de cristal que la hace más resistente en el exterior contra pequeños impactos. Sin embargo, cuando se rompe, la mayor tensión interna hace que se rompa en muchísimos trozos romos, no en fragmentos dentados.
El vidrio templado puede verse con frecuencia en lugares comunes como cabinas telefónicas, puertas de ducha y ventanillas de pasajeros en los coches (y en algunos casos, aunque raramente, en ventanas de aluminio).
No todas las ventanas tiene por qué ser transparentes. Para determinadas zonas de la casa, puede ser importante permitir la entrada de luz natural, pero no necesariamente una visión clara.
Los cuartos de baño son el ejemplo más común en este caso, aunque las paredes de separación, las salas de reuniones y las consultas médicas también suelen tener las mismas necesidades.
En este caso, para garantizar la intimidad y una luz adecuada, la solución es el vidrio texturizado. Este tipo de vidrio se somete a un proceso de rodillo que altera una de las superficies, por ejemplo, esmerilándola.
Con el aumento de la urbanización, el aislamiento acústico es cada vez más importante en muchas viviendas. El vidrio insonorizado consiste en varias hojas de vidrio separadas por cavidades de aire, normalmente rellenas de un gas especial.
Estos gases pesados, combinados con vidrios múltiples y más gruesos, aumentan el aislamiento acústico sin alterar el aislamiento térmico y el cerramiento.